miércoles, octubre 17

ALMA GEMELA
Según la creencia en el alma gemela hay una réplica de mis sentimientos, de mis aspiraciones, de mis sueños, de mis anhelos, de mis gustos, de mis deseos que vaga por algún lugar de este universo en el que habito. Algún día nuestros caminos se cruzarán, bastará una mirada, una palabra, una actitud o un gesto para que nos reconozcamos y en ese instante mágico, atravesados por una flecha de poderoso magnetismo, quedaremos unidos para siempre. Hay quienes se entregan con fervor más evidente a esta creencia y hay quienes encuentran modos intelectualmente más elaborados de sostenerla. Con más impaciencia o con más lentitud, con mayor descuido o con más prevenciones, con más fe o con más escepticismo, los hombres y mujeres occidentales despertamos al amor con esta creencia y transitamos nuestra experiencia sentimental guiados por ella. Hay quienes pueden desprenderse de esta ilusión y hay quienes la sostienen como una bandera irrenunciable. De la leyenda de Tristán e Isolda en adelante, la mitología amorosa en la que abrevamos se alimentó en abundancia de ella: Romeo y Julieta, Casablanca., Lady Di y Quién-sabe-quién; la lista puede ser ampliada por cada persona hasta construir un vasto muestrario del amor imposible.

En verdad, pienso que la creencia en el alma gemela es una piedra fundacional de la infelicidad amorosa que impregna estos tiempos. ¿Si solo podré amar de verdad a alguien igual a mí, y si sólo podré ser amado de veras por quien me reconozca como su igual, y es necesaria la existencia del Otro en el amor, cuál es su sentido?

La creencia en el alma gemela anula la noción de lo diferente. Y, en mi opinión, son las diferencias las que pueden generar, mantener y nutrir un amor fecundo, sanador, creativo, reparador e iluminador. ¿No es lo que el amado tiene de distinto lo que me impulsa a la exploración de lo desconocido tal como se manifiesta en él; y no es ese impulso de que, transformándose en una energía permanente, hace del amor una experiencia de conocimiento?

Inestabilidad Mental

6 comentarios:

Pepe Deapié dijo...

Despreciamos los mayores tesoros, porque en el fondo, no creemos en los tesoros.
Un saludo.

Kristalle dijo...

Me ha gustado tu entrada!

Pamela dijo...

Que genial!
Como haces para que la entrada te aparezca así? Me gustaría que me digas :)

Nancy dijo...

No tengo palabras, tus relatos siempre me hacen acelerar el corazón, son tan hermosos.
Espero leerte pronto!

ru dijo...

Que pasada de blog. Eres un amor :) me encantaria conocer tu opinion y contar con tu apoyo en el mio! mil sonrisas

Anónimo dijo...

Hola!! Me encanta la entrada y tu blog es precioso, no dejes de escribir nunca! Te dejo mi blog pasate si quieres: http://sentimientosmuyadentro.blogspot.com.es/ Un besazo